26 de noviembre de 2012

Primer tango en París

Bonjour à tous mes amis ! Esta es la primera entrada de este espacio tecnosófico desde hace poco más de 5 meses, debido en parte a mi estancia académica como profesor en Francia y en parte por mi nuevo nombramiento como Director de Tecnologías de Información en la institución para la que laboro actualmente.

Físicamente estuve en el campus Télécom Ecole de Management, que forma parte de L'école d'Ingenieurs SudParis, específicamente en la ciudad de Évry (antes Esson), la cual se localiza al sur de la ciudad de París, ubicado en 9 rue Charles Fourier.

Recibí la invitación como profesor invitado a la Estancia Académica Verano 2012 de esta institución para dar un curso sobre tecnologías de información de innovación.

Debido a mi gusto por la geoinformática, el tema del curso fue sobre la publicación de datos espaciales a través de Web Map Services, haciendo uso de Mapserver y Quantum GIS para publicar y consumir, respectivamente, este tipo de servicios.

Agradezco esta invitación y las atenciones del Dr. Leonardo Soto y de Christian Camilleri, quien es President de la Maison des Eléves (MAISEL) SudParis.

Debo de confesar mi conmoción por lo que tuve la oportunidad de conocer en Francia, que fue mi hogar por espacio de tres semanas, en lo referente a su cultura, a su nivel de vida y obviamente, a su tecnología.

Para empezar, el tren conocido como RER (Réseau Express Régional) es el motor que mueve a los habitantes de esta gran ciudad cosmopolita, sobre su superficie y por debajo de ella. Lo mismo sucede con el Métropolitain o simplemente "metro", para aquellos que son chilangos.

De igual forma, el llamado TGV (Train à Grande Vitesse) o tren de alta velocidad, manejando una velocidad promedio de 300 km/h, es una proeza tecnológica de Francia ya que permite la movilidad entre las diferentes ciudades de este país con París, aseguran, en menos de 6 horas. Me han comentado que alguna vez llegó a alcanzar una velocidad de poco más de 550 km/h.

Toda esta maquinaria funciona a base de energía eléctrica, la cual se genera en las diversas centrales nucleares que se encuentran distribuidas por todo el país. Por cierto, en México solo tenemos la planta nuclear de Laguna Verde en Veracruz, la cual produce entre el 4 y el 5 por ciento de la energía eléctrica que consumimos, así que distamos mucho de la infraestructura que tiene Francia en este sentido.

Cuando vas por la calle, puedes ver que la mayoría de automóviles y de camiones son de la marca Renault, lo que me da a entender que existe un declarado sentimiento de orgullo nacional, o bien, que el producto nacional es de muy buena calidad y que nada tiene que pedirle a otras marcas de otros países.

Y de esto me asaltó una pregunta a medio caminar: ¿ Si hiciéramos automóviles mexicanos, el mexicano los preferiría por encima de los extranjeros ?

En cuanto a la arquitectura de las casas, es muy diferente a las que existen en México. Se aprecia una mezcla de arquitectura medieval combinada con lo inherente a las comodidades del siglo XXI, esto es, que a pesar de que por fuera se vea una construcción medieval, la "choza" tiene todos los servicios básicos además de contar con conexión a Internet.

¿ A que eso no lo podemos ver en las "chozas" de colonias como El Batán ?

Por cierto, como un dato interesante, me comentan que fue aquí en este campus de Télécom Ecole de Management de donde surgió la distro Mandrake Linux, actualmente Mandriva, resultado de la fusión de las distribuciones Mandrake y Conectiva.

La ciudad de París es, como dijera el célebre escritor Victor Hugo: "La plus belle". Lo que más extraño de ella es el caminar bajo el sol a la par del río Sena, ya que si bien el agua no es cristalina y de pronto despide cierto olor, puedo asegurarles que este río le da mucho de su personalidad a esta gran ciudad.

El emperador Napoleón bonaparte dijo: "Deseo que mis cenizas reposen a las orillas del río Sena, al lado del pueblo francés que tanto he amado". Esta frase puede leerse dentro de su descomunal tumba.

Finalmente les agradezco a todos los que me han mandado correos o se han comunicado conmigo a través de GTalk preguntándome cuándo volveré a escribir. Prometo que seguiré escribiendo, en verdad tenemos mucho de qué hablar y qué compartir.

Hasta la próxima entrada.


Charles